Los vinos frios / Sobre la temperatura de servicio
¿Cuántos de ustedes bajarían la temperatura de un tinto con buen cuerpo?
Si le echan un vistazo a la contraetiqueta de un vino tinto reserva recomiendan servirlo entre 16º y 18º de temperatura. Eso se parece más a la de una bodega que a la de una casa moderna con calefacción central. La regla general: si se sirven los tintos demasiado calientes, se acentúa el alcohol y saben cómo una sopa, además de desaparecer su estructura.
Por otra parte se suelen servir los blancos a temperatura de una heladera, unos 4º, cuando en realidad deberían estar a unos 8º o 10º, e incluso un poco más para un blanco reservado y con más cuerpo.
Suponiendo que no tenga usted ni las ganas ni los instrumentos necesarios para tomar la temperatura del vino, intente dejar los tintos y los blancos más concentrados en un sitio fresco, o déjelos de 30 a 40 minutos en la heladera antes de servirlos. Incluso los blancos frescos sin madera o los rosados no necesitan más de hora a hora y media, dependiendo de lo eficaz que sea la heladera y de lo llena que esté.
Los espumosos y los vinos dulces, en cambio, necesitan media hora más.
|