|
|
|
|
|
Los mercaptanos, un defecto
evitable.
De las mil y pico
sustancias volátiles detectadas (hasta
la fecha) en el vino, alrededor de 100 son compuestos
azufrados. De éstos, los mercaptanos (o
tioles) destacan porque muchos de ellos son realmente
apestosos y poderosos. De hecho se añaden
pequeñas cantidades de mercaptano al inodoro
gas natural para que podemos olerlo y detectar
su presencia peligrosa. Y los mercaptanos son
la base del desagradable olor del halitosis o
mal olor de boca, del de la carne podrida y del
de las heces. También se encuentran en
productos naturales como el ajo o los espárragos:
por eso son éstos unos reconocidos "enemigos" del
vino.
Pero no todos son necesariamente "malos". Según
Bruce Zoecklein, director de grupo de química enológica
de Virginia Tech (www.vtwines.info)., algunas de estas mismas sustancias
azufradas son la base de ciertas características varietales,
creando sensaciones de membrillo, café, tostados, champiñón
y pomelo.
Sin meternos en el fondo técnico del tema, podemos decir
que los mercaptanos suelen desarrollarse a partir del ácido
sulfhídrico. El sulfhídrico se produce de forma natural
durante el proceso de fermentación. Si no se trata correctamente,
cantidades excesivas de esta sustancia puede terminar en mercaptanos.
La producción excesiva de sulfhídrico durante la
fermentación puede tener varias causas: viñas plantadas
en suelos muy pobres, ciertas castas tintas de clima cálido
(como el tempranillo), la clase de levadura empleada, restos de
azufre de tratamiento tardío en viña, o falta de
nitrógeno en el mosto.
El sulfhídrico es una sustancia muy volátil (punto
de ebullición -60,28ºC) y se puede eliminar del mosto/vino
con cierta facilidad; pero una vez "evolucionado" en
mercaptano es menos volátil y bastante más difícil
de eliminar. Los mercaptanos sencillos como el etanotiol pueden
eliminarse con cobre; pero los de una composición química
más compleja como 3-mercaptohexanol o sulfuro de dimetilo,
requieren un tratamiento más sofisticada y costosa.
Hay dos clases de mercaptano (y otros azufrados): los llamados "ligeros" con
un punto de ebullición por debajo de los 90º (como
etanotiol a 35º) , y los "pesados" (como metionol)
con un punto de ebolución por encima de los 90º. Los
ligeros son detectables en nariz en cantidades muy pequeñas
(menos de una parte por millón); pero los "pesados" son
generalmente detectables sólo a niveles superiores a los
50 PPM. Siendo más volátiles, los compuestos ligeros
son más fácilmente eliminados del vino. Hay excepciones,
pero generalmente los pesados se convierten en "defectos permanentes" y
dificilmente eliminables.
En resumen
Según
el profesor Zoecklein,
los defectos más
comunes en el vino son
olor a corcho, compuestos
azufrados (sulfuroso,
azufre reducido) y las
notas de oxidación.
Entre los defectos azufrados,
los más comunes
(y molestos) en vinos
terminados son el exceso
de sulfuroso y los mercaptanos.
La presencia de aromas
de mercaptanos es un
defecto evitable y debe
considerarse un fallo
enológico. Se
hace controlando los
niveles de sulfhídrico
y haciendo llegar suficiente
oxígeno al mosto/vino
(remontados, micro-oxigenación,
trasiegos), así evitando
el proceso de reducción
que convierte el sulfhídrico
en los malditos mercaptanos.
Por:
Jens Riis
Fuente: elmundovino.com » ver
nota completa
|
|
|
|
“The forme of Cury” un antiguo manuscrito de cocina inglés.
El
Rey Richard II de Inglaterra
(1367 - 1399) tenía
un gusto por la buena comida
inigualable, entre los manjares
con los que solía deleitarse
habitaban todo tipo de comidas
e ingredientes que, muchas
veces, mandaba a traer especialmente
de su lugar de origen por emisarios.
También así su
staff de cocineros era formidable,
entre ellos trabajaban los
mejores profesionales del reino.
Esto llevó a que gradualmente
fueran adoptando técnicas
y recetas que, en pos de complacer
a su Rey, fueran aptas a su
gusto. Es así que en
1390 presentan un manuscrito
con aproximadamente 250 recetas
y técnicas de cocina.
Curiosamente el manuscrito
es el primero, en idioma Inglés,
en mencionar la existencia
del aceite de oliva o la utilización
de recetas realizadas con carnes
exóticas tales como
ballenas, lobos marinos, garzas
entre otras.
La diferencia que presenta el libro del Rey Richard II es que es
un compendio cohesivo de recetas y una completa descripción
de técnicas afines a éstas. En si éste es
el primer libro con la intención de enseñar a cocinar,
tal cual los libros modernos. El nombre del manuscrito original
es imposible de saber ya que gran parte se perdió en el
tiempo “The forme of Cury” es el nombre otorgado por
Samuel Pegge, librero que lo re-editó en el siglo 18.
Sin duda alguna otro de los detalles interesantísimos
de éste libro es la siguiente mención
en su prefacio: “Aprobación y consentimiento
por los maestros de la medicina y la filosofía
que componen su -refiriéndose a Richard-
Corte”. Se preguntarán por qué tan
singular mención. En la Edad Media la medicina
y la cocina estaban fuertemente ligadas, muchas
plantas y pócimas eran utilizadas para sanar
pacientes y además se tenía un temor
muy grande a los venenos. Mencionar la aprobación
de los hombres de ciencia de la corte significaba
dejar claro que ninguna de las recetas era mortal
o perjudicial.
Otro de los detalles importantes es el observar la compleja elaboración
de algunos platos orientados especialmente a la Corte. Se mencionan
centros de mesa hechos de frutas representando batallas navales,
personajes históricos y hasta figuras tama ño real
de los nobles.
» Escaneo
de la versión del siglo
18 realizada por Samuel Pagge
|
|
|
|
Wine 2.0: Vinos evaluados
y compartidos por los consumidores.
Para las personas que quieran conocer nuevos vinos o revisar los
que ya conocen a partir del gusto y evaluación de consumidores,
una buena opción es navegar algunas sitios dedicados a este
tema y concebidos con estructuras Web 2.0. Estos son sitios basados
en comunidades de usuarios que fomentan la colaboración
y el intercambio ágil de información entre todos
a partir de herramientas como blogs, foros, etecetera.
Lamentablemente todavía no existe un sitio de estas caraterísticas
específico para vinos de Argentina o al menos de Latinoamérica,
pero vale la pena conocer que que se tratan estos 3 recomendados
provenientes del lejano norte:
Snooth:
Es un buscador que nos permiten recibir recomendaciones personales
de vinos a degustar en relación a las revisiones y valoraciones
de vinos que hayamos realizado anteriormente. Por lo tanto necesitaremos
de un mínimo de cinco revisiones en adelante para empezar
a recibir dichas recomendaciones personales, que serán mejores
cuantas más valoraciones hayamos realizado.
Podemos buscar vinos en su propio buscador aunque puede darse la
circunstancia de que ese vino que estábamos buscando no éste
en la base de datos, con lo que podremos sugerirlo para que el
equipo de Snooth lo valore y lo añada manualmente.
Cork’d:
Este sitio permite hacer la revisión de cualquier vino,
escribiendo una opinión, puntuando según la calidad,
añadiendo etiquetas que identifican sabores y añadiendo
otras características objetivas como el año de cosecha,
la zona o el precio aproximado. También permite tener una
lista de los vinos que uno desea probar, así como de las
botellas que tienes en tu colección. Todo esto con las ventajas
típicas de una red social: comentarios, recomendaciones
y demás contacto entre los usuarios siempre son bien recibidos.
Buyersvine:
Sobre este sitio vale la pena ver y probar el extraño buscador
de vinos que tiene. Tanto por el tipo de categorización,
algunas muy raras como "para compartir con", "tipo
de vacaciones", "profesión", "deporte";
como la misma interfase que permite arrastrar y tirar ("drag & drop")
en los campos de búsqueda múltiples/combinables.
Otra característica interesante es que a la hora de comprar
un vino, une al consumidor directamente con la bodega.
Fuente: genbeta.com
» Snooth
sitio web
» Cork’d
sitio web
» Buyersvine
sitio web
|
|
|
|
Fer Isella & Makanudos presenta su "Doña Furia
Gaucha".
16
de Noviembre en Virasoro
Bar /
Guatemala 4328, Ciudad
de Buenos Aires / 4831-8918
18
de Noviembre en Thelonious
JazzClub / Salguero 1884,
Ciudad de Buenos Aires
/ 4829-1562
Fernando Isella es un músico argentino cuyo oficio como
productor artístico es bien conocido en el ambiente discográfico.
Doña Furia Gaucha es una obra conceptual, compuesta entre
1999 y 2000, grabada en 2003 en Nueva York y terminada en Buenos
Aires (mezcla, mastering, arte gráfico) entre 2006 y 2007.
Pese a tan largo proceso de gestación, el material es sumamente
fresco. Por momentos se trata de un curioso viaje desde el folklore
argentino al jazz norteamericano que ignora las experiencias de
la denominada “fusión” de la década del
80. Los músicos que integran el grupo también son
un reflejo de este viaje: dos músicos italianos y dos argentinos,
reunidos en los Estados Unidos.
Una expresiva vidala en inglés, que sin embargo
no suena extraña, y profundas visitas a La
juguetona (Hnos. Díaz) y a La arenosa (Cuchi
Leguizamón) son quizás los puntos más
altos de un trabajo que no tiene puntos bajos. El
tipo de sonido del disco, responsabilidad de Facundo
Rodríguez, llevando a un color metálico
los teclados de Isella (que comandan casi todas las
piezas) es novedoso. Como si se tratara de un instrumento
más, la ecualización agrega una interesante
tensión a esta obra que transita todo el tiempo
de lo local a lo global sin prejuicios.
» MySpace
Fer Isella
» Virasoro
Bar
» Thelonious
Jazz Club
|
|
|
La cantante Delfina Oliver
estrena septeto y segundo disco.
Miércoles
7 y 14 de noviembre, 21.30
hs. Thelonious
JazzClub / Salguero 1884,
Ciudad de Buenos Aires
/ 4829-1562.
Los miércoles
7 y 14 de noviembre Delfina
Oliver estrenará en
Thelonious la música
de su segundo disco a grabarse
a fin de año, con
su flamante Septeto formado
por Juan Cruz de Urquiza
en trompeta, Ramiro Flores
en saxos, Juan Canosa en
trombón, Cristian
Bórtoli en contrabajo,
Oscar Giunta en batería
y Miguel Tarzia en guitarra
y arreglos. El grupo presentará un
repertorio de standards
de jazz de autores como
Gershwin, Porter y Billie
Holliday entre otros, así como
composiciones de Charles
Mingus y Joni Mitchell,
en particulares versiones
con arreglos de Tarzia,
siempre dejando espacio
para el juego y la improvisación.
Una propuesta musical de
riesgo y una rara ocasión
para ver una cantante de
jazz local acompañada
de un ensamble de muchos
y buenos músicos.
Delfina Oliver, voz
Juan Cruz de Urquiza, trompeta y flügelhorn
Ramiro Flores, saxo y clarinete
Juan Canosa, trombón
Miguel Tarzia, guitarra y arreglos
Cristian Bórtoli, contrabajo
Oscar Giunta, batería
» MySpace
Delfina Oliver
» Comentarios
de su último show
en La Nación
» Thelonious
Jazz Club
|
|
|
|
|
|